Hoy es uno de esos días que mi coco se ha puesto a divagar sobre lo que hago… Dos días después del triatlón de Oliva, me planteo muchas cosas…
He leído mucho acerca de triatlón, Ironman para ser mas exactos… De que hacer, como hacerlo, que llevar, esto, aquello… Yo soy un novato en este mundillo, pero en estas dos temporadas que llevo como “triatleta”, tengo mis propias conclusiones…
Me hace mucha gracia cuando alguien te pregunta acerca de tus tiempos en un Ironman, o de cualquier otra carrera y sin decirte nada, te das cuanta que muchas veces sus caras hablan por ellos… Como diciendo que “no se porque gastas tanto tiempo en algo que nunca vas a ganar…” o casas así…
Como he dicho en alguna ocasión, para mi el Ironman, no es el día “d”, sino el camino hasta llegar allí… Esas planificaciones anuales, donde uno sabe casi con un año de anterioridad donde va a competir, esos entrenamientos de sol a sol en los momentos de máxima carga, esas carreteras interminables, montañas imposibles de cruzar, pulsaciones que piden la “hora”, madrugones, sueño, hambre, cenas de amigos perdidas, fines de semana sin poder viajar con la novia o amigos, series interminables en la piscina, cientos de Euros gastados, preocupaciones, mas preocupaciones, sacrificios personales, y un sin fin de malabarismos para poder llevar a cabo el entrenamiento que hacemos para preparar medianamente bien un Ironman, y que todos o la mayoría que estáis leyendo esto ahora saben…
Para mi un ironman, se vive desde el mismo momento en que te planteas la posibilidad de “apuntarte”… que nervios verdad… Un ironman, se vive y se absorbe desde ese mismo momento y en delante de tu vida como triatleta… Porque ser ironmanes, se convierte en una forma de vida, que por supuesto no pasa desapercibida para los mas cercanos a nosotros… Amigos, familiares, compañeros de trabajo, pareja…
Estoy hablando de irornman, pero podría hablar perfectamente de ultrafondistas, sprinters, nadadores, ciclistas, o cualquier cosa que uno se plantee en la vida… Cualquiera que se dedique a algo con entrega, ilusión y honestidad lo debería vivir así… Porque sinceramente yo no concibo la vida sin afrontar las cosas de esa manera… Para mi eso es el Bushido... El camino del guerrero...
El domingo recordé después de ver los tiempos que hace la gente por ahí, que no me gusta nada perder… recordé porque siempre he tenido un espíritu ganador… A mi no me gusta perder ni a las canicas... Pero siendo honesto, en este deporte se necesitan muchos años de entrenamiento para tener unos tiempos decentes, o bueno, tener una genética especial…
Voy a seguir entrenando.. con mas ilusión que nunca… Viviendo ese camino, ese camino hasta el ironman, ese camino que forma parte de mi vida y de los que me rodean… Para bien o para mal… pero es mi camino…
He leído mucho acerca de triatlón, Ironman para ser mas exactos… De que hacer, como hacerlo, que llevar, esto, aquello… Yo soy un novato en este mundillo, pero en estas dos temporadas que llevo como “triatleta”, tengo mis propias conclusiones…
Me hace mucha gracia cuando alguien te pregunta acerca de tus tiempos en un Ironman, o de cualquier otra carrera y sin decirte nada, te das cuanta que muchas veces sus caras hablan por ellos… Como diciendo que “no se porque gastas tanto tiempo en algo que nunca vas a ganar…” o casas así…
Como he dicho en alguna ocasión, para mi el Ironman, no es el día “d”, sino el camino hasta llegar allí… Esas planificaciones anuales, donde uno sabe casi con un año de anterioridad donde va a competir, esos entrenamientos de sol a sol en los momentos de máxima carga, esas carreteras interminables, montañas imposibles de cruzar, pulsaciones que piden la “hora”, madrugones, sueño, hambre, cenas de amigos perdidas, fines de semana sin poder viajar con la novia o amigos, series interminables en la piscina, cientos de Euros gastados, preocupaciones, mas preocupaciones, sacrificios personales, y un sin fin de malabarismos para poder llevar a cabo el entrenamiento que hacemos para preparar medianamente bien un Ironman, y que todos o la mayoría que estáis leyendo esto ahora saben…
Para mi un ironman, se vive desde el mismo momento en que te planteas la posibilidad de “apuntarte”… que nervios verdad… Un ironman, se vive y se absorbe desde ese mismo momento y en delante de tu vida como triatleta… Porque ser ironmanes, se convierte en una forma de vida, que por supuesto no pasa desapercibida para los mas cercanos a nosotros… Amigos, familiares, compañeros de trabajo, pareja…
Estoy hablando de irornman, pero podría hablar perfectamente de ultrafondistas, sprinters, nadadores, ciclistas, o cualquier cosa que uno se plantee en la vida… Cualquiera que se dedique a algo con entrega, ilusión y honestidad lo debería vivir así… Porque sinceramente yo no concibo la vida sin afrontar las cosas de esa manera… Para mi eso es el Bushido... El camino del guerrero...
El domingo recordé después de ver los tiempos que hace la gente por ahí, que no me gusta nada perder… recordé porque siempre he tenido un espíritu ganador… A mi no me gusta perder ni a las canicas... Pero siendo honesto, en este deporte se necesitan muchos años de entrenamiento para tener unos tiempos decentes, o bueno, tener una genética especial…
Voy a seguir entrenando.. con mas ilusión que nunca… Viviendo ese camino, ese camino hasta el ironman, ese camino que forma parte de mi vida y de los que me rodean… Para bien o para mal… pero es mi camino…
Que razón tienes!!!!! Cuando pones tu número de tarjeta y das intro.....sabes que ya no hay vuelta atrás.....esa noche sueñas con bicis, playa, kilómetros, geles, pinchazos.....
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